lunes, 8 de julio de 2013

Capitulo 11. BICICLETAS POR MOTOS.

(Narra David)
Tenia que ir tras ella.
He de reconocer que he intentado quererla pero es que Nerea sigue en mi cabeza, pero sobretodo, sigue en mi corazón.
La quiero, sin querer quererla. Es algo difícil, y complicado, pero, digamos que así es el amor.
Fui a hablar con Claudia, necesitaba un por que. Un, ¿que le pasaba?
Me senté a su lado. Y le pregunté.

Yo: Ehh, ¿que te pasa?
Claudia: No... nada... -Dijo secándose las lágrimas.
Yo: ¿Te ha dejado?
Claudia: Si, me ha utilizado, para lo que quería, ha fingido quererme y cuando mas enamorada estaba de él... me ha dejado. Como un trapo sucio. Como si no hubiese sido nada para él.

Me sentía como si eso que me estaba contando ella... lo hubiese hecho yo con Nerea. Como si la hubiese ilusionado de que algo tendríamos y luego, de la noche a la mañana, por la estúpida edad... la hubiese dejado sola. En un mar de preguntas. Preguntándose si ella había hecho algo malo, o si ha dicho algo inadecuado. No me merece. Soy lo peor. No tendría que haberla dejado. La quiero. La quise. La querré. Es mi princesa. Y... el simple hecho de la edad me ha hecho renunciar a lo que mas quiero. No. Tengo que recuperarla. Saber si me quiere. Saber de ella. Necesito saber de ella. Si esta bien. Si esta mal. Si me ha olvidado. O si nunca he significado nada para ella. TENGO QUE SABERLO, por que la quiero, quiero que sea la princesa que despierte a mi lado. La princesa a la que le diga un te quiero cada noche. Soy tonto y por tonto la perdí.

Yo: No te merece... Si te mereciese te diría un te quiero cada día, como te mereces.
Claudia: Llamala.
Yo: ¿Que?
Claudia: Que llames a Nerea. La quieres, llamala.
Yo: No querrá saber nada de mi.
Claudia: Pruebalo.
Yo: Quería ayudarte pero, me has acabado ayudando tu. Gracias. Ahora secate las lágrimas, arreglate y va que tenemos que ensayar que tenéis concierto.
Claudia: Tenemos, el concierto también es vuestro.
Yo: Si, pero recuerda, ahí arriba sois nuestras enemigas.
Claudia: Y aquí abajo tu mejor amiga.
Yo: Mi mejor amiga.

Nos abrazamos y nos metimos. Había salido para ayudarla, y me ayudó ella. Mi mejor amiga. No buscaba una mejor amiga. Pero aquí la tengo. Mi mejor amiga.

(Narra Blas)
Cris... la quiero. Si. A lo mejor lo de la otra noche parecía que solo buscara divertirme pero de verdad, que la quiero. Se lo diría todos los días, a todas horas, un te quiero tras otro pero... tengo miedo. Miedo a que ella si que lo hiciese por divertirse. Miedo a que si me confieso me diga que no. Que no siente lo mismo. Que solo me ha utilizado... Llámame cobarde, pero es la primera vez que tengo miedo. A lo mejor es que de verdad me he enamorado.

Hicimos la prueba de sonido. Salio perfecta. entonces abrieron las puertas.
Enseguida salimos nosotros. Y las chicas hicieron su plan. Teníamos que hacerlas prohibido para que la gente se sintiese atraída hacia ellas. Tal vez era un poco arriesgado el plan, por que habría quien las odiaría, pero... teníamos que hacer que ellas triunfasen. Les costaría lo suyo está claro, que al principio solo irían las que les atrae lo prohibido, pero DREAM GIRLS, son tan buenas que lo conseguirán. Si.
Cuando salimos nosotros, al poco rato salieron ellas, hicimos como una batalla. Si. Una pelea. Pero de canto.
Eran buenísimas, pero teníamos que hacerlas MUY PROHIBIDAS, así que cuando acabamos la batalla "llamemos a seguridad" y las bajaron a la fuerza. La gente aplaudía, nunca había visto a la gente aplaudiendo así. No era que aplaudiesen por que se las habían llevado, si no por que les había gustado.
Así que decidí preguntarles.

Yo: Sentimos este improviso, pero... ¿os a gustado?

El publico empezó a gritar, aplaudir, chiflar, y gritar si. Era alucinante, a pesar de que nos llevábamos mal con Dream Girls... EL PUBLICO LAS AMABA. Realmente, alucinaba.
Seguimos con nuestro concierto.
Y... TERMINÓ.
Bajemos con las chicas, y un poco a obligación las hicimos subir.
El publico no sabia como se llamaban así que ellas empezaron a hablar.

Andrea: HOLAAAAAAAA, somos Dream Girls. y bueno a ver, los chicos y nosotras nos odiábamos, pero tras ver el éxito que hemos tenido, nos han pedido perdón y que por favor subiésemos a cantar una canción, así que allí vamos.

Empezaron a cantar y el publico parecía... QUE LE ENCANTABA. Si, parecía que estas chicas iban a llegar lejos.

(Narra Andrea)
Cuando terminamos bajamos. Besé a Carlos. Y me puse a gritar. No podía creer que... HUBIÉSEMOS TRIUNFADO TANTO. Decidimos que nosotras tres teníamos que ir con el publico. Así que salimos. Un montón de Auryners nos rodearon.
Escuchaba preguntas como ¿Quien sois? ¿Me firmas un autógrafo? ¿Cuantos años tenéis?
Así que decidimos contestarlas a todas.

Claudia: Somos Dream Girls, en YouTube tenemos alguna cover... en incluso nos podéis seguir en twitter.
Cris: Tenemos entre 20 y 22 años.
Yo: Claro. hemos salido para hacer lo que nos pidáis. Pero nada relacionado con  Auryn.

Estuvimos firmando todo lo que nos pedían. Y tras un rato salio Olaya. Ya dije que era nuestra representante. Y tuvo que poner un poco de orden.

Olaya: A ver, Auryners de mi corazón, siento deciros que... Dream Girls se tiene que ir ya, por que nos espera el hotel, ya sabéis si os a gustado hablar con el Alcalde y que las contrate. Sois grandes.

Y nos fuimos dentro. Al rato salimos y nos fuimos al hotel. Teníamos que descansar. Eso si. Había sido un día para recordar.

(Narra Alvaro)
Quería que fuese una noche especial. Sabia que María siempre había soñado con una escena tipo Tres Metros Sobre el Cielo, así que tenia que hacerlo. No tenia moto, pero tenia que darle una noche especial. Así que robé una bicicleta. Si, una bicicleta sustituía a la moto de sus sueños.
Llamé a la puerta, no podía hacerlo igual que en 3MSC pero si que iba a ser una noche especial. Ella abrió. Estaba yo. En un quinto piso de hotel, con una bicicleta.

María: ¿Tu eres tonto?
Yo: Uhm... si. Pero sube. Te prometo que no lo olvidaras.

Tras mucho insistirla al final subió. Íbamos con la bicicleta por el hotel, cogí el ascensor en bicicleta. Pero al salir del hotel todo cambio. Tras dejar la bicicleta nos esperaba un caballo. Blanco, con manchitas negras. Lo había alquilado.
Sin carroza.
Osea, solo con el caballo y la silla de montar.
Fuimos con el hasta la playa. Precioso. Tenia que ser romántico. Ahí nos esperaba un mantel a cuadros, tipo picnic, muy gracioso. Y un camino de velas desde nuestros pies hasta el mantel. La verdad es que no se como se me había ocurrido esto.
Pero era todo idea mía. Esta noche iba a ser especial para ella. Se lo merece.
Bueno la verdad es que esto suena a pedida de matrimonio, pero no es así. Esto es una cena a la luz de la luna.
Solo era la mejor cena, para la mejor princesa.
Lo mere ce todo y mas.
Después de cenar, fuimos a la orilla del mar, nos estábamos mojando los pies, y de repente ella le pegó una patada al agua y me mojó entero, empecé a correr detrás suya. La cogí y nos metimos los dos en el agua. Allí la besé. Seguimos besandonos y salimos del agua. Nos tumbamos sobre el mantel. Besandonos todavía. No podía separarme. La quiero mucho.


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